
El fibrocemento, popularmente conocido como Uralita, ha sido durante décadas un material ampliamente utilizado en la construcción tanto de techos, conducciones, depósitos…
Lamentablemente se trata de un producto realmente peligroso tanto al manipularlo como por el simple hecho de vivir en contacto con él.
Sobre el 12% de su composición es amianto, un tipo de fibra mineral que está demostrado que produce cáncer y otras varias enfermedades mortales. Se calculan unos 6000 muertes al año por esta causa.
El riesgo es mayor para las personas que trabajan o han trabajado con este producto durante periodos prolongados, pero cualquier grado de exposición representa un peligro real.
Por eso su producción y comercialización está prohibida desde el año 2002. Lamentablemente en nuestra localidad hay gran cantidad de este material y se maneja sin ninguna medida de seguridad.
Su eliminación no es obligatoria para usuarios particulares aunque es más que recomendable para evitar riesgos absurdos. Este plan en ningún caso obligará al ciudadano, solo le facilitará eliminar este riesgo para sus vidas.
Su eliminación resulta costosa para los ciudadanos ya que solo personal entrenado y con las adecuadas medidas de protección personal pueden manipularlo.
Por ello lanzaremos un plan de eliminación de amiantos y sus derivados que facilite su completa eliminación.
El plan contemplaría estas medidas fundamentales:
- Creación de un censo de amianto en el pueblo.
- Contratación por parte del ayuntamiento de una empresa especializada para que retire todos los elementos de este material que no estén instalados, esto es, las muchas placas que hay almacenadas en corrales, trasteros, tiradas por el campo…
- Creación de un grupo de contratación colectiva que permita obtener mejores precios por parte del ciudadano en el desmontaje y eliminación del amianto que tenga instalado en su casa.
- Ayudas y bonificaciones fiscales para paliar el gasto que todo esto suponga.
- Asesoría sobre su reposición con materiales alternativos carentes de riesgo.
Interesante iniciativa, es aterrador tener un material tan peligroso por todas partes y que a nadie parezca importarle. Otro gran problema es que cuando quieres deshacerte de el no hay donde.